He vuelto para escribir el 4º capítulo!

Hola chic@s!
Sí, he vuelto! Llevaba 7 días sin escribir, puesto que estaba en Benidorm... Quería contaros un poquito mi experiencia, y comunicaros que mi estancia allí me ha dado muchas ideas para seguir con la historia de Volver a ser Jess.
Benidorm es un lugar precioso, y aunque creais que no, y por muy ecologista que sea, los edificios le dan una belleza ejemplar; sobre todo de noche, cuando las luces urbanas se encienden y la gente sale a dar sus peculiares paseos; todo eso y el mar junto con las montañas y las palmeras hacen una perfecta combinación que hace de Benidorm un lugar fantástico... La verdad es que nunca había ido, y me he sorprendido porque no me lo imaginaba tan... animado; en Benidorm tienes muchas opciones: o estar de marcha todo el día o ir solo para descansar de tu agotadora rutina; si vas al centro urbano comprobarás que las numerosas tiendas son un gancho para la gente, mas los bares y sitios de ocio, que garantizan una diversión asegurada; en cambio hay personas que van para descansar, que también pueden; la zona tranquila consta del paseo marítimo; y no hay nada mejor que ir por la mañana temprano a la playa, cuando toda la playa es para ti y puedes estar bien tranquilo.
¿Mi experiencia?
Yo he hecho de todo un poco. Por la mañana era genial ir a la playa a las 9:00 de la mañana. Sí sí, a las 9:00, y es que no hay tanto lío de toallas, hamacas y sobrillas y hay muy poca gente. Luego por la noche era pura diversión; no hay nada mejor que ir al centro urbano de tiendas. Cuando no me apetecía, pues iba a dar una vuelta lentamente por el paseo marítimo junto al mar y la luz de la luna. Vamos, una gozada.
Si tuviera que elegir un lugar al que ir otros años, sería sin duda Benidorm.
Y sin enrollarme mucho más, os comunico que mañana empezaré a escribir el 4º capítulo, ¿vale? :)
Un beso a tod@s los/as lectores/as! :)

Novedad: La mejor amiga de Jessica!

Hola chicas! Bueno, todas me habéis pedido que ponga ya el 4º capítulo, lamento informaros de que eso va a ser imposible, tendréis que esperar una semana, lo siento mucho! Me voy de vacaciones y allí no me conectaré, así que... Pero antes de irme, quería actualizar sobre una novedad en la historia; la llegada de un nuevo personaje; es Mary Jose, la mejor amiga de Jessica, una chica extrovertida, simpática, sin complejos y muy risueña. Le da igual lo que la gente piense de ella, está a gusto consigo misma y, lo mejor, hace que los demás tambien se sientan a gusto... Muchas chicas la envidian por ser así, es tan positiva y tiene tanta energía...
Jessica y Mary Jose se conocieron cuando ambas tenían los 11 años ya cumplidos, y Jessica sabía desde el principio que Mary Jose no era una interesada como las demás, si no que era una buena amiga en serio. 
¿Cómo se conocieron realmente?
Mary Jose llegó nueva al colegio de Jessica. La gente siempre la miraba con cara rara, como si fuera un bicho raro, a lo que Jessica le partió el corazón. Era horrible ver como trataban a alguien tal y como le habían tratado a uno mismo hace tiempo. 
Así que Jessica se le acercó en la salida de las clases. Mary Jose pensaba que se iba a meter con ella, lo que a Jessica le sorprendió. Empezaron a hablar, y se dieron cuenta de que coincidían en muchas cosas... A partir de entonces siempre quedaban en las casas de ambas, o hacían fiestas de pijamas, vamos, que se lo pasaban super bien juntas. 
Al resto de chicas del colegio les daba una envidia tremenda ver como Jessica disfrutaba tanto con Mary Jose, puesto que éstas sólo querían ser la amiga de Jessica para parecer más populares. Y no entendían como podía juntarse con esa "bicho raro" de Mary Jose, pero... Con el tiempo vieron que era una chica espléndida y super enérgica... Aunque aún la siguen teniendo envidia.

Y bien, esta es la historia.
Gracias a las lectoras por hacer todo esto posible, sois mis ganas e inspiración para seguir :)
Besos chicas,
OS ECHARÉ DE MENOS!

CAPITULO 3 : El chico del Tuenti

Le acepté. Me despertaba cierta intriga; ¿me conocía de verdad? ¿O le conocía de antes, cuando yo también tenía Tuenti-famoso? No, no, imposible. Porque yo me llamaba Lizzie Rawnie. Y en mi Tuenti actual, después de que me quitaran el otro, tengo mi nombre verdadero, y sólo tengo a gente que conozco. Pero... ¿Por qué me había dicho; "aún te recuerdo"? Eso es señal de que ya hemos hablado antes... Dios mío, qué lío.
Pues eso; me puse a ver sus fotos, eran todos de famosos, en ninguna salía un chico que no cantara o saliera en la televisión. Mala suerte. Lo malo es que él viera mis fotos. Yo no sabía quien era, pero él si... No dudé en ir hacia su perfil y dejarle un mensaje privado:

"Ola`Cody Larsson´ , si asi t llamas en realidad. Parece Q me conoces, cierto? Pero yo a ti no. ¿xQ dices "aun te recuerdo"? hemos hablado ants? O nos conocemos en serio? respondeme, please, necesito saberlo, si no kieres q te borre. Yo solo tengo en mi perfil a conocidos. Ncsito saber tu nombre." 

¿Se lo enviaba? Si, ¿no? ¿Y si metía la pata? Pero TENÍA que hacerlo. Así que sin pensarlo más, le di a la tecla enter. 

Estuve dándole a "Inicio" todo el tiempo cada 20 segundos, para ver si me había contestado. Ya estaba aburrida, en serio.
LLevaba media hora esperando el maldito privado, hasta que apareció el típico dibujito verde con un "1" en el apartado "Mensajes". Corrí a abrirlo, estaba sofocada. ¿De quién era? Cody Larsson. Y... ¿Qué ponía? Antes de empezar a leer, tragué saliva.

"Hola `Jessica Ortiz Anderson´. Y sé que te llamas así. Te reconozco al 100 %, han pasado unos cuantos años y sigues igual de guapa. Por lo que veo has cambiado mucho, eres muy popular por lo que parece... ¿Que pasó? Mi nombre ya lo sabes, supongo que lo recordarás. Adiós, Jess." 

Tras leerlo, seguí mirando la pantalla del ordenador durante... ¿veinticinco segundos, por lo menos? Un escalofrío me recorrió el cuerpo entonces. A ver, la historia es ésta: Cuando yo tenía 9 años, era super pija, no como ahora, no era humilde ni modesta, quería que me compraran de TODO, vamos, una cría repelente. Un verano fuimos de vacaciones al pueblo de mis tíos, cuando aún vivían los dos. Recuerdo que tenía un amigo, el único amigo que yo tuve de pequeña, que al principio no me soportaba. Él era muy "de pueblo", puesto que vivía por ahí cerca, pero también pasaba ahí el verano con sus abuelos. Pasaban los días, y poco a poco él me fue cambiando, dejé de ser tan egoísta y empecé a ser un poco más modesta... Los momentos con él eran mágicos, nos lo pasábamos genial jugando... Era la única persona en este mundo que me llamaba Jess. Y yo le preguntaba "¿por qué me llamas así, si todos me llaman Jessica?" Y su respuesta era siempre la  misma: "Quiero que me recuerdes de alguna forma, pero también quiero hacerte sentir especial." Siempre nos dábamos un abrazo, el típico abrazo de amigos, más que un abrazo, un achuchón. Fueron los mejores días de mi vida con él. Tener un amigo así era alucinante... Pero llegó el momento de irme. Hicimos un pacto; "La próxima vez que nos veamos volveremos a jugar a todo esto, ¡el paraíso volverá! Te quiero Jess."
De ese pacto me acuerdo como si lo hubieramos pactado ayer.
Pero lo extraño es... Que no me dijo su nombre.
No, no me lo dijo. Por eso tanto sofoco por el chico del Tuenti. Me ha llamado Jess. ¿Y si es él? ¿O simplemente es una forma de llamarme Jessica? Joder, es que las cosas se complican, porque ha dicho "aún te recuerdo"... Noté que me estaba exprimiendo el cerebro de una manera inútil.
Ya no volvería a ver a ese chico. Lo sabía. No volvería al pueblo de mi tío. Y de todas formas... Él tenía la misma edad que yo, seguro que se había vuelto un tío como todos los demás.
Pero es que encima... ¡No recordaba su cara! Bien... Lo tenía facilísimo. (Véase mi sarcasmo)
En esos momentos, solo quería dormir. Ya había pensado demasiado como para seguir haciéndolo.

CAPITULO 2 : Todo comenzó el verano pasado

El verano pasado teníamos el plan de irnos de vacaciones a la playa. Estábamos todos contentos, por mucho que nos peleáramos Rebe y yo. Teníamos la sensación de que iba a ser el verano de nuestras vidas. Faltaba sólo una semana para irnos, y yo ya estaba pensando en hacer la maleta. "Qué incordio eres, esperate unos días" era lo que siempre me decía mi hermana Rebe. Yo la contestaba con una simple mirada de odio, aunque en el fondo ella sabía que no era de verdad.

Recuerdo que una mañana a mi padre le llamaron del trabajo a primera hora de la mañana; y, sí, estaba de vacaciones, pero el jefe tenía algo que comunicarle. Lo sé porque lo escuché todo desde el pasillo, que daba a su habitación. Al oír la puerta, me metí rápidamente en mi habitación, con la puerta entornada, para ver la reacción de mi padre, por si estaba contento o algo así. Miré por la ranura, y mis ojos únicamente captaron a un hombre sofocado e inquieto.
Le seguí por la casa, tenía curiosidad. Cual su sombra, iba detrás de él, de eso me acuerdo perfectamente. Hasta que cuando llegó al salón, me vio reflejada en uno de los espejos de la pared.
-Jessica...
-Eh...-tragué saliva- Papá, es que... Te veía tan sofocado, que...
-Ven, anda. -señaló sus piernas para que me sentara en su regazo-
-Papá, ¡no me voy a sentar ahí! -reí y me senté a su lado, en el sofá- A ver, dime...
-El jefe me ha llamado. No sé lo que quiere, pero me ha dicho que vaya hacia la oficina ahora. Cuida de tu hermana mientras no estoy.
-De cual, ¿de Rebe? -reí- es más peligrosa que Sam.
Mi padre me miró como diciendo "cuidado con lo que la dices a Rebe que la puedes liar". Bueno, tal vez no quería decirme eso con esa mirada, pero yo lo entendí así.
Después de vestirse y lavarse, se fue hacia el trabajo. Yo me quedé leyendo revistas viejas en el comedor, no me apetecía levantarme del sofá.
Un momento, ¿aún no he dicho en qué trabaja mi padre? Mi padre trabaja en un concesionario, se encarga de vender los mejores coches. Por eso gana mucho dinero, porque los vende.
Cuando me aseguré de que se había ido, me fui a mi habitación. Estaba castigada sin ordenador unos días por no haberle avisado de que me iba con mis amigas. Él estaba aún trabajando y cuando llegó del trabajo yo no estaba en casa. Se empezó a sofocar, y cuando llegué... Os podréis imaginar.
A lo que iba. Encendí el ordenador, que por cierto es un Windows XP. Nunca me han gustado los Vista ni el Windows 7. Lo primero en lo que me metí fue en Tuenti... Lo típico, ¿no? Tenía muchisimos comentarios, muchisimas fotos y muchisimas peticiones de amistad; del instituto, las academias y todo eso. Vamos, una increíble petación. Asegurándome de que conocía a todos los que me habían enviado una solicitud, iba aceptando, hasta que entre tantas peticiones, me encontré con un tal "Cody Larsson", uno de esos chicos que pertenecen al Tuenti-famoso, esa gente que se crea perfiles en los que editan fotos, ya sean de personajes famosos o de chicas normales. Y lo sé porque yo antes tuve uno de esos. A lo que iba. En su mensaje ponía:
"Hola, guapa. Aún te recuerdo"
Y eso me puso los pelos de punta.

CAPITULO 1: La clase de persona que soy

Mi nombre es Jessica. Aunque la mayor parte de la gente me llama Jessi, en plan cariñoso. ¿Jess? No, nadie. Pero algo me dice en mí que alguien hace mucho tiempo me llamó así, y me cambió la vida. Lo juro, no recuerdo quién, solo recuerdo que esa persona me hacía realmente feliz...
Tengo infinidad de amigos. No, no soy la típica chica con tres o cuatro amigos de la que ningún chico se ha fijado aún... Soy popular, y qué quieres que te diga, no me siento orgullosa. Desde cuarto de primaria mi vida dio un giro. Aún no recuerdo cómo, ni por qué, la gente empezó a juntarse conmigo y me conocía medio colegio. Fue como si un hada madrina me cambiara... Porque yo era, pues, una chica del montón. Nadie quería cambiarse los cromos conmigo. Me sentaba sola en el recreo e imaginaba mundos inexistentes, con hadas, duendes y una unión entre niños, adultos y ancianos. Una conexión entre la naturaleza y el hombre... Demasiada imaginación tenía yo. En serio, y pensaba que eso se cumpliría alguna vez...
El caso es que ahora, pues no se, los tíos me agobian, en serio. Todos son iguales... Empiezan con el ligoteo; que si guapa, que si nena.. ¡Buf! Es agobiante... Y la verdad es que, mis amigas verdaderas se pueden contar con los dedos de una mano... El resto son interesadas. Y quién si no, el mundo está lleno de ellas.
Respecto a mi familia... Vivo con mi padre. Mi madre se fue por "cuestiones de trabajo" un año y... no volvió nunca. No sé nada de ella. Tú sentirías pena por mi, pero yo ya lo he afrontado.
Aunque respecto a lo que hizo mi madre... a eso se le llama cobardía.
¿Hermanas? Tengo dos; una de ellas es mi hermana pequeña. Se llama Samantha, pero vamos, que TODOS la llamamos Sam. Es más, hay gente que ni sabe que su nombre verdadero es Samantha...
La otra, es Rebe, mi hermana mayor. Tiene 16 años y... es la típica adolescente con ganas de fiesta. Siempre nos estamos peleando, pero sé que puedo contar con ella, y... la quiero. En el fondo, muy en el fondo, sabemos que entre nosotras hay un cariño especial que nos une.
Bueno, y respecto a mi padre... Es un buen padre, no es el típico que no te deja hacer nada, él confía en mi, sin embargo me cuida y me mima, soy su "princesa" a pesar de mis 14 años...
No me puedo sentir desgraciada, porque no lo soy. Tengo amigos, familia, y... bueno, lo de "novio" no lo incluyo, porque no tengo, pero ¿sabes qué? Tampoco tengo muchas ganas, todos los tíos son iguales.
Mi situación económica... No soy pobre, pero vamos, que tampoco soy millonaria, soy de clase alta, pero no tanto.. Yo me entiendo. Me refiero a que no soy la típica niña mimada que solo compra en Gucci.
La cuestión es que... hace 14 años vine al mundo y me tocó nacer con una maravillosa familia y en una maravillosa ciudad, Stipslow.